Para este verano y van bien
contra el calor se ponen de moda las bebidas frescas. La sangría desde hace
unos años a esta parte se está elaborando sin vino tinto o mejor dicho sin
alcohol. De esta forma no perjudican y pueden beberla todos en casa incluso los
más pequeños. Hay muchas formas de prepararla y tal vez se le conoce cómo
sangría porque al añadirle las frutas consigue ese tono rojizo.
Preparación: Se pelarán
piezas de fruta diferente quitándoles los huesos y se cortarán a rodajas para
no atragantarnos. Se pueden, tras su lavado y pelado y cortadas en láminas
finas, poner por ejemplo: Trocitos de albaricoque, melocotón, o cualquier fruta
que nos guste. Se volcará todo en una jarra que se llenará hasta arriba de vino
fresco sin alcohol aunque también se puede sustituir éste por refresco de
limón, eso ya va en gustos. La jarra con la bebida y la fruta variada se
llenará de cubitos de hielo y la tendremos un tiempo considerable en el
congelador. Y la serviremos en vasos con una cuchara pequeña o tenedor para ir
bebiendo del refresco y pinchando las piezas de fruta para comerlas. Está
deliciosa y es muy refrescante para tomar cómo postre en días calurosos.