En
verano también es frecuente algún baile de disfraces donde los más atrevidos se
visten de personaje de terror: Señoras ataviadas de bruja; hombres convertidos
en vampiros; chicas luciendo maquillaje zombi; chicos con máscaras de monstruo
y una gran variedad de ropajes para pasarlo bien en vacaciones. Porque hay
muchos a quienes no les vasta con celebrar la famosa noche de Halloween, si no
que cualquier momento es bueno para divertirse disfrazándose de manera
terrorífica. Ya que el verano está pensado para ir a la playa; salir; ir de
marcha; bailar; descansar; hacer barbacoas; y entre otras muchas cosas: Celebrar un baile
de máscaras. Tras las vacaciones da gusto compartir fotografías evocando
momentos en que lo pasamos muy bien, quedando recuerdos incluso de una fiesta
carnavalera donde nos vestimos de momia, fantasma u hombre lobo. El calor no
suele ser un problema dado que casi todo está climatizado para que el ropaje no
resulte demasiado caluroso. Y así, entre refrescos o helados y alegría, hay
quienes disfrutan organizando eventos veraniegos para pasarlo bien, donde los
amantes del cine o la literatura de terror desearán tras las vacaciones que
vuelva pronto el verano para repetir con otro disfraz.