martes, 22 de octubre de 2013

NOVIEMBRE Y LAS FLORES.

Sé que los cementerios son lugares desagradables para la mayoría de gente. Pero para primeros de noviembre hay que reconocer que las flores que muchas personas dejan son muy diversas, feas y también preciosas y bien preparadas en tarrinas, ramos, sueltas, adocenadas dentro de algunas diversidades. Se puede ver todo tipo de claveles respecto a tamaños y colores; aunque abunde el crisantemo también hay rosas de todos los gustos y muchas de ellas son preciosas; las coronas han avanzado mucho respecto a las de antaño ya que actualmente se diseñan con variedad de especies florales entremezcladas: azucenas, gladiolos, lirios, etc. De manera que dentro de que el panorama de por sí no sea alentador, ofrece una espectacular visión floral, con bonitas cruces tapizadas botánicamente. El arte floral es tan variopinto que las macetas de exterior en algunos casos también ornamentan nichos, capillas o fosas. Las floristerías durante esas vísperas hacen posible que sus clientes salgan agradecidos con ramos o tallos sueltos, bonitos de verdad por su colorido.


Si ese día hace sol, las flores brillarán ofreciendo su cromatismo maravilloso a los visitantes; y caso de que se trate de un día nebuloso, la entremezcla botánica también da cierto tono agradable. Para navidades las flores y plantas seguirán siendo, porque lo son durante todo el año, protagonistas, alegrando nuestros hogares cómo en breve decorarán esos cementerios de los que hablo.